El antiguo Egipto es una de las civilizaciones más misteriosas de la historia de la humanidad. Ha dejado evidentes pruebas de infraestructuras y tecnología que fueron extraordinarias para ese momento (hasta donde sabemos). Hoy en día, todavía nos sentimos fascinados por lo que el antiguo Egipto llegó a lograr, y todavía nos preguntamos cómo fueron capaces de construir cosas tan complicadas con una tecnología aparentemente modesta. La ciencia moderna todavía no puede explicar algunos de los logros de los egipcios, uno de ellos es la construcción de una pirámide perfectamente estructurada.
Su desarrollo es realmente tan inusual que algunas personas creen que una posibilidad es que el antiguo Egipto fuera destino para civilizaciones extraterrestres. Y la verdad, es que se trata de una gran explicación para todos los avanzados métodos que los egipcios debieron haber usado para lograr todo lo que hicieron. Pero hay más, la prueba física definitiva de que los extraterrestres efectivamente visitaron Egipto en el pasado podría haber sido encubierta por los gobiernos mundiales. Sin embargo, gracias a algunos intrépidos arqueólogos, estas evidencias podrían salir a la luz. El pasado mes de noviembre un grupo internacional de científicos logró descubrir una nueva cámara vacía de gran tamaño en el interior de la Gran Pirámide de Keops. Ahora se cree que podría contener un trono de origen extraterrestre para ayudar al Faraón en su camino hacia el más allá.
Un trono de origen extraterrestre
La misteriosa ‘cámara vacía’, de al menos 30 metros de largo, que se descubrió en el interior de la Gran Pirámide de Guiza, podría contener un ‘trono extraterrestre’ hecho con meteoritos. Los arqueólogos creen que el trono se colocó ahí para ayudar a Faraón en su paso a la próxima vida. Según un texto antiguo que los investigadores analizaron, decía que el faraón, antes de alcanzar las estrellas del norte, tendrá que pasar las “puertas del cielo” y sentarse en su “trono de hierro”.
El enorme vacío se descubrió a principios de noviembre de 2017 como parte del proyecto Scan Pyramids, dirigido por Mehdi Tayoubi (HIP Institute, París) y Kunihiro Morishima (Universidad de Nagoya, Japón). Sin embargo, los arqueólogos se mostraron desconcertados por el uso de esa misteriosa cavidad. Ahora Giulio Magli, director del Departamento de Matemáticas y Profesor de Arqueoastronomía en el Politécnico de Milán, dice tener la respuesta.
“Hay una posible interpretación, que está en buen acuerdo con lo que sabemos sobre la religión funeraria egipcia como se ve en los Textos de las Pirámides”, dijo Magli. “En estos textos se dice que el faraón, antes de alcanzar las estrellas del norte, tendrá que pasar por las ‘puertas del cielo’ y sentarse en su ‘trono de hierro’.”
La Gran Pirámide de Guiza (también conocida como pirámide de Keops o de Jufu), construida alrededor del año 2550 a.C., es uno de los monumentos más grandes y complejos de la historia de la arquitectura. Solo se puede acceder a sus habitáculos internos a través de estrechos túneles, uno de los cuales, antes de llegar a la cámara funeraria, se ensancha y se eleva de forma repentina formando la llamada Gran Galería.
“La cámara vacía recién descubierta está sobre esta galería, pero no tiene una función práctica de ‘liberar peso’, porque el techo de la galería ya estaba construido con una técnica de voladura por esta misma razón”, continuó explicando Magli.
El astrofísico italiano dice que, al mirar el trono de la madre de Keops, la reina Hetepheres, que fue hallada en mal estado y reconstruido por la Universidad de Harvard, podemos tener una idea de cómo será el trono, que es una silla baja de madera de cedro cubierta con láminas de oro y cerámica. Por lo que la de Keops podría ser similar, pero cubierta con finas láminas de hierro meteórico.
“Por supuesto, no sería de hierro derretido, sino de hierro meteorítico, es decir, caído del cielo en forma de meteoritos de hierro (distinguible debido al alto porcentaje de níquel) y nuevamente citado en los textos”, explican los investigadores.
Según algunas investigaciones, los egipcios usaron el “hierro de meteorito” para objetos especiales diseñados exclusivamente para los faraones, incluida la famosa daga de Tutankamón.
La teoría propuesta por el astrofísico Giulio Magli abre infinitas posibilidades, como de una vez por todas demostrar la conexión Egipto-extraterrestre. ¿Cuál es el verdadero motivo de utilizar material precedente del espacio? ¿El trono extraterrestre tiene alguna conexión con la construcción de las pirámides? ¿La misteriosa gran cámara vacía en la Gran Pirámide de Guiza podría contener algún tipo de “portal hacia las estrellas”? Como siempre, muchas preguntas sin respuestas.
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